This too shall pass, o también «esto es temporal, esto también pasará» para bien o para mal.
Hablemos de la vida como temporadas en una serie, ajá, como si fueras Fleabag y de vez en vez la cámara volteara hacia a ti y enfocara tus pensamientos, tal vez como si fueras Mrs. Maisel y cada momento de tu vida llevara una reflexión dramatizada como perfomance, o bueno, ya para mis oldies cada vez que Lorelei y Suki se acercaban a tener su propia posada y les pasaban cosas que solo podían tener sentido desde la cultura pop.
Me gusta conocer la vida de los demás, porque una vez que lo empiezas a hacer, empiezas a reconocer la humanidad en ellos y entonces es más fácil entender que aquelles también vienen de un lugar en ruinas, en deconstrucción o en plana reconstrucción y entonces sabes que cada decisión o momento decisivo venía con un desarrollo de personaje que no tenía nada que ver contigo sino con un viaje personal que en ese momento requería de ser así, aunque a los personajes secundarios nos doliera (sí, la neta, serás protagonista de tu vida, pero no de los demás.)
Es ahí, en la historia personal de cada quién donde empecé a escuchar las diversas temporadas que han ido viviendo en su vida hasta el presente y me vuela la cabeza cada vez que escucho la vida o vidas que han tenido en diferentes épocas, a veces muy hasta arriba, en la cima del éxito (lo que signifique para cada quien) a veces, muy en los abajos, en el fondo, muy en el fondo, ahí donde solo tragas lodo y no ves luz y en cada una de ellas, aquí siguen, viviendo, registrando, contando experiencias y es que a eso podríamos dedicarle la vida, no? A vivir experiencias para después recontarlas.
De las conversaciones que más me inspiran, son esas, donde escucho la travesía de la vida vivida, y el cómo los ha llevado a estar ahí, en ese momento sentadxs conmigo, contándome sus temporadas previas.
Alguna vez, preguntaba: ¿Cómo te das cuenta que estás terminando un temporada o que es necesario terminarla y empezar otra?
Y de las respuestas que más se repetían, era que: Te sientes diferente, no te hallas, algo te incomoda, te estorba, andas más disociadx de lo normal, tus playlist no te llenan, no encuentras la canción que quieres para salir a caminar, te empieza a dar flojera pasar por los mismos lugares, amas a tus personas pero ya te urge conocer gente nueva, te encantan tus bares favoritos, pero no será que hay alguno nuevo más cool?
A veces los cambios de temporada terminan con una relación o con el fin de tu contrato en la chamba, a veces empiezan en tu cumpleaños o en año nuevo, a veces solo un día te despiertas, estás harto y tiras todos los cigarros, regalas la ropa que ya no te pones y sales a correr por primera vez en años; en realidad nunca sabes cuándo ni cómo pero empiezas a sentirte diferente y en el espejo se nota.
¿Cuántas vidas llevas? No dejará de parecerme loquísimo lo extraño que es sentirte que perteneces a ciertos lugares y personas, que así es tu vida, que así será, que tus rutinas que te guían por la vida son las que te definen como persona aunque, cuando entiendes que la vida no es lineal, entiendes que esas rutinas también cambiarán y encontrarán otra forma de darte paz y parte importantísima de saberte llevar por temporadas es que te responsabilizas por tus acciones, por tus decisiones, la guionista que decidirá los eventos canónicos o qué veneno aventarás en una conversación, la de vestuario que fijará un look o varios para diferentes situaciones, la de presupuestos una de las más difíciles porque te va a decir que no hay $$$ y dependerá de ti si se hace o no, la de RH que invitará a personajes recurrentes a hacer cameos, que renovará el contrato de otrxs personajes o la que hará el casting hasta para aquel antagónico que te hará dudar de cada camino que tomes, la de locaciones y fotografía, quiénes decidirán dónde y cómo quedará registrada aquel gran concierto o ese beso sentados en la barra de la cocina.
Hemos sido cuento en otras historias, hemos tenido nuestras propias historias para cada cuento que contamos.
Estas temporadas no tiene tiempo definido, nada es lineal y todo tiene caducidad, lo que hiciste hace 10 años cuenta para ti, y si no sigues avanzando y creando nuevas situaciones, terminará siendo algo que se cuenta en alguna sobremesa, ¿no quieres seguir contado más historias? ¿cómo crearás esas historias?
Mis últimas temporadas han acabado e iniciando dramáticamente y también muy romántico porque pues como yo decido, me las hago bien de escena final. La última temporada terminó por ahí de julio en una playa de Veracruz e inicio un ciclo más, aunque en general, este 2023 ha sido un año lleno de capítulos buenísimos e interesantísimos que me han cuestionado la vida entera y también me ha dado lo mejor de lo mejor, este año he viajado más que en otros años, he tenido tantas conversaciones, he tomado tantas fotos, he registrado momentos que elevan el valor de mi vida y para ir cerrando este choro gigantesco de lo importante que es entender que así como pasan momentos trágicos y que fisicamente piensas que es imposible salir de estos, saldrás, créeme, saldrás, y así como hay momentos TOP OF THE ROCK, más GRANDES QUE LA VIDA, así hay días de flojera total y está bien y es bonito, solo tu lo decides.
Hay días que veo mis fotos de hace unos meses o de estas fechas el año pasado y solo digo: «es que esa ya no soy yo» y yo necesito reconocerme siempre.
Al final, lo que quiero decir es que hagan cosas, digan sí a las experiencias, salgan a caminar por otras calles, acepten las invitaciones, busquen eventos, métanse a esas clases que siempre habían querido, empiecen ese hobbie que les ha hecho ojitos desde hace un ratote, ponte ese ouffit para ese «lunes encerrada en la oficina» y cuando activas todo eso que siempre dejas pasar porque «que flojera» «para qué si solo yo lo voy a ver», «mejor no voy», cosas maravillosas para pasan y entonces cada capítulo es un capítulo de la vida de alguien que SÍ quieres ver y yo muero de ganas por ver cada uno de los míos, por eso me emociona hacerme vieja, quiero saber qué más sigue! quiero más!
Cuénteme sus inicios y finales de temporada, cuéntenme a quién han decido aventar por las escaleras mientras rían maléficamente, cuéntenme cómo se llamaría la playlist y qué canciones llevará, cómo quieres que cambien tus atuendos, el cielo es el límite, literal eres el autor de cada día que vives, así sea el episodio más aburrido que criticaste por no tener sentido o el día más increíble que acabó con el atardecer más amarilloso que tenía naranjas con rosas.
Besos de coneja.